La escritura de las mujeres, 2020

octubre 19, 2020 por ofeliaeol

Afirma Joanna Russ en su obra Cómo acabar con la escritura de las mujeres (1983) que la ausencia de prohibiciones formales contra el arte comprometido no excluye de la presencia de otras que, a pesar de ser informales, son muy poderosas, entre ellas la pobreza y la falta de tiempo libre son frenos realmente potentes en el arte y la literatura. Familia, escritura y trabajo dentro y/o fuera de casa como necesario para la supervivencia es la realidad de las mujeres en 2020, como ya lo era en el siglo XX y mucho antes, cada tiempo sus cosas, pero en todos ellos se repiten estos factores como freno a la escritura de las mujeres. Nuestra realidad socioeconómica y cultural, siendo el acceso a la formación y materiales clave también, ayer y hoy coincide en estos factores y otros.

Russ reseña a la escritora contemporánea, Kate Wilhelm, que dijo lo siguiente: … me di cuenta de que el mundo, de que prácticamente todas las personas que lo habitan, va a seguir dando cada vez más responsabilidades a cualquier mujer que esté dispuesta a continuar aceptándolas. Y cuando las otras responsabilidades sean demasiado grandes, las que tenga consigo mismo tendrán que desaparecer. O bien deberá adoptar una posición plenamente egoísta, negarse al mundo y aceptar la culpa que sea. A no ser que una mujer sepa que es otra Virginia Woolf o Jane Austen, ¿cómo puede decir que no…?

Aún con todas las dificultades y desigualdades, las mujeres hemos escrito siempre e incluso logrado publicar, tener lectores/as y algunas trascender. De Egeria a Russ y otras tantas escritoras contemporáneas.

¿Trascender? ¿Mantenerse en el relato y en las baldas de las bibliotecas o librerías? ¿Ser parte de la historia de la literatura y la cultura? Como mujeres, como escritoras.

Este año hemos podido disfrutar en el Instituto Cervantes de Madrid de la exposición Tan sabia como valerosa. Mujeres y escritura en los siglos de oro. Autoras como Santa Teresa de Jesús, Sor Juana Inés de la Cruz, María de Zayas y Sotomayor, Ana Caro de Mallén, la Monja Alférez, etcétera, lograron escribir y publicar en los siglos de oro, saltaron la valla de su contemporaneidad y las desigualdades de su tiempo, y aún así su fama en vida no siempre les ha otorgado el reconocimiento póstumo. Como señala Luís García Montero, director del Instituto Cervantes, en la introducción del libro editado en torno a esta exposición comisariada por Ana M. Rodríguez-Rodríguez, no pocas escritoras que en su época gozaron de fama y lectores/as se han quedado en el camino, huérfanas de reediciones, homenajes, estudiosos/as y lectores/as. Mal común para narradoras, poetas, dramaturgas, pensadoras y artistas que fueron saludadas por la crítica de su tiempo y luego olvidadas, en su mayoría, por la del siguiente.

Si algo hemos aprendido durante los tres años de vida y recorrido del proyecto creativo colectivo Creadoras Letras es que eso ha sido y puede seguir siendo así, y que tras ese olvido de la escritura de las mujeres del «siguiente tiempo» a sus obras, tarde o temprano han llegado los trabajos y esfuerzos de recuperación de su legado, de nuestra genealogía, por parte de nosotras mismas. La labor de recuperación , de reedición, de homenajear a las invisivilizadas, de estudiarlas y en definitiva de leerlas, ha venido y viene casi siempre de mano de otras mujeres, creadoras de cambio. Y esto es así hoy día, pero ya lo fue en siglos anteriores. Lo cual nos indica de forma clara que no podemos ni debemos bajar la guardia, que tan sabia como valerosa que es la escritura de las mujeres, parte del reto es frenar que acaben con la de aquéllas que nos precedieron y con la nuestra, la de nuestro tiempo, en la siguiente era. Que en el siglo XXII en los libros de texto de literatura e historia, sean como sean para entonces, figuren desde Rosalía de Castro, Carolina Coronado, Emilia Pardo Bazán o Carmen Laforet hasta Almudena Grandes, Rosa Montero, Marta Sanz, Cristina Morales o María Bastaros, a quién hoy día de las escritoras estoy leyendo. Seguimos.

Madrid, 19 de octubre de 2020

Ofelia Elicia Oliva López

¡FELIZ DÍA DE LAS ESCRITORAS 2020!